La asociación Ecologistas en Acción (EA) ha señalado las zonas más degradadas del litoral cántabro con la 'concesión' de 27 banderas negras y otros nuevo puntos negros repartidos por toda la costa regional. El listado se recoge en el informe Caos en la costa. Banderas negras 2010 El documento analiza la situación de toda la costa española e incluye un informe específico sobre el caso cántabro.
La asociación cuestiona también el Plan de Puertos e Instalaciones Portuarias, que contempla "grandes actuaciones" en Castro Urdiales, Laredo, Colindres, Comillas y San Vicente de la Barquera con el objetivo de generar 2.750 atraques nuevos para embarcaciones de recreo. En su opinión, estas grandes actuaciones generarán "graves impactos ambientales".
Relación de banderas y puntos negros
De las 27 banderas negras 'concedidas' este año en Cantabria, seis corresponden al municipio de Castro Urdiales, una al municipio en su conjunto, otra a la localidad de Islares y las otras cuatro a las playas de Dícido (Mioño), Brazomar, Ostende y Oriñón.
Caso inédito de afección sobre la costa Cántabra y del País Vasco en una misma actuación.
Playa de Ostende. Castro Urdiales. Arenal de 750 metros de carácter artificial con material aportado de una cantera local. Esta playa recoge cada verano a cientos de bañistas. Tiene una vida de aproximada de quince años y a fecha de hoy, la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar está estudiando la posibilidad de proceder a la retirada y machaqueo de unos 5.000 metros cúbicos de los cantos rodados acopiados en la playa de La Arena, en el municipio de Ciérbana (Vizcaya), para su transporte y extendido en la playa castreña de Ostende.
El arenal de Ciérbana, fue regenerado a finales de los 80 y en los últimos años ha venido sufriendo un proceso de reducción considerable de arenas. En diciembre de 2009, empezó la extracción de arenas y fondos marinos a 1,3 km. frente a la playa de la Arena en Muskiz y Zierbena, en un proyecto que podría alcanzar hasta 10 millones de metros cúbicos.
La primera fase de extracción ya ha sido concluida habiéndose extraído 1,8 millones de metros cúbicos. La segunda fase de extracción podría comenzar en octubre de 2010.
Pese a los problemas encontrados con la calidad de los sedimentos extraídos y la importante oposición social e institucional: el Ayuntamiento de Muskiz ya se había opuesto y recientemente también han manifestado su oposición el Ayuntamiento de Zierbena y las Juntas Generales de Bizkaia.
La culminación del proyecto supondría un elevado impacto ambiental: exterminio de la flora y fauna, movimiento de sedimentos contaminados, reducción de los arenales playeros,…
Toda esta destrucción para alimentar una playa artificial creada para satisfacer las “demandas turísticas” de Ostende, donde las urbanizaciones llegan a primera
línea de mar. Este es el mejor ejemplo de todo el estado español de cómo no se debe actuar en la costa.