Cinco crías de buitres leonados recobraron ayer la libertad en Castro
Urdiales, en el Monte Ventoso. Los jóvenes ejemplares se incorporaron
ayer al paisaje castreño tras un mes de ausencia.
Este verano, los pollos fueron rescatados y trasladadas por
SEO/Birdlife de Castro hasta el centro de recuperación de aves de la
localidad vizcaína de Gorliz. La zona oriental de Cantabria carece de
una instalación de este tipo, algo que puede ser historia en un año,
según Felipe González, delegado de SEO/BirdLife Cantabria, quien
recordó ayer que la recientemente aprobada Ley de Conservación señala
la necesidad de un centro de estas características en Cantabria. Las
rapaces o aves heridas en la zona occidental de la región se llevan a
Cabárceno, pero los cinco buitres leonados de la única colonia de
España a pie de Costa del Monte Candina fueron trasladados a Vizcaya
por cercanía y otros motivos expuestos ayer antes del acto por Virginia
Iturriaga coordinadora local de SEO: «¿Cómo llevas a estos pollos de
buitre de cinco kilos en el asiento de atrás de tu coche hasta la otra
punta de Cantabria?»
Los cinco buitres rescatados regresaron
ayer de su particular viaje de rehabilitación a la localidad vizcaína
de Gorliz. Llegaron hasta el puerto de La Muñecas -al linde entre
Vizcaya y Cantabria- cinco meses después, con tres kilos más y una
anilla en la pata para poder ser localizados por telescopio y seguir
sus andanzas, porque serán incluidos en un estudio de ecología. Los
buitres salieron tímidos de las cajas. Minutos más tarde, volaban en
libertad sobre el cielo castreño. La puesta en libertad de las aves se
realizó como medida de protesta contra el trazado de la línea eléctrica
Penagos-Güeñes. Al acto no pudieron acceder los medios gráficos tras
una prohibición de funcionarios del Servicio de Montes de Vizcaya.
Extraído de: eldiariomontanes.es