Hay un dicho popular que dice que una persona para estar completa
'tiene que haber plantado un árbol, escrito un libro y tenido un hijo'.
A los alumnos del colegio público Riomar y los estudiantes del
Instituto José Zapatero Domínguez de Castro Urdiales ya les queda menos
para cumplir los tres requisitos porque esta semana han procedido a la
plantación de árboles en sus respectivos centros, en colaboración con
la Asociación Bosques de Cantabria.
Los primeros que sembraron las raíces de 200 árboles en el entorno del
colegio público Rioma', ubicado en el barrio castreño de Cotolino,
fueron los alumnos de Primaria. Lo hicieron a principios de la pasada
semana. Más tarde, el viernes, los jóvenes del Instituto de Educación
Secundaria José Zapatero Domínguez se sumaron a la propuesta y
plantaron medio centenar de árboles autóctonos: robles, castaños,
fresnos, abedules y arces en su instituto.
Coincidiendo con esta
segunda plantación se celebró el Día del Bosque Autóctono. Además los
ejemplares ya plantados también recibieron sus cuidados y fueron
podados. «Además de acercar los datos de las especies autóctonas a los
escolares del colegio e instituto para que conozcan más a fondo las
especies de Cantabria, este tipo de iniciativas hacen conectar más a la
nueva generación con la 'vida verde' que adorna su entorno más
inmediato y que se conciencien de la importancia y respeto por el
ecosistema», explicó una maestra que participó en el acto.
Como padres
Los
niños y jóvenes castreños además de ser orientados en la manera
adecuada de sembrar un árbol por parte de los monitores de 'Bosques de
Cantabria', contaron con la colaboración de profesores de sus
respectivos centros. Ahora, más concienciados, parte de la futura
generación castreña vigilará, como si de un padre se tratase, el
proceso de crecimiento de los árboles «porque se les hace que se
involucren en su crecimiento, encargándose de su cuidado y
mantenimiento».
Reforestación
Estas actuaciones se
encuentran enmarcadas dentro del Programa de Reforestación que está
llevando a cabo Bosques de Cantabria durante este otoño, con la
colaboración económica del Gobierno de Cantabria y el Fondo Social
Europeo. Miembros de este colectivo recalcaron que «los centros
educativos, ayuntamientos, juntas vecinales y asociaciones culturales
que estén interesadas en participar en esta programa de reforestación
pueden hacerlo, todavía contactando con nosotros». Desde la comunidad
educativa se aplaude este tipo de iniciativas en un mundo en el que se
destruyen a diario grandes masas forestales.
Un 'chiqui-bosque' en el Riomar
Los alumnos de Primaria del colegio Riomar plantaron cerca de
doscientos árboles en zonas verdes del recinto escolar. Es la semilla
de un futuro bosque plantado en el interior del colegio público. Será
el pulmón verde que un día adornará el entorno del centro educativo
situado en el barrio de Cotolino.
Los responsables de este
proyecto, Amaia González y Pedro Rasines, miembros de Bosques de
Cantabria explicaron a los alumnos «la importancia de recuperar los
árboles autóctonos, mostrándoles las semillas y cómo reconocerlos en la
naturaleza».
Como garantía del mantenimiento del arbolado que se
ha plantado, se ha firmado un convenio de colaboración entre el colegio
y Bosques de Cantabria, que intenta garantizar el cuidado y atención
necesarios para garantizar que el 'chiqui-bosque' del Riomar llegue a
ser adulto.
Extraído de: eldiariomontanes.es