22 de octubre de 2010, 16:29
Partido vibrante el que se espera este sábado en Elche ante la visita del Castro, ya que ambos equipos se encuentran igualados en la zona media de la general de la división de honor del balonmano femenino nacional. El Castro viaja con la ilusión de obtener algo en la compleja pista de Carrús, aún a sabiendas que las ilicitanas son un bloque compacto, muy bien trabajado por su mister Aldeguer, y que explotan como locales sus armas como nadie, pero viendo la máxima igualdad que existe en la mayoría de los partidos que se están jugando, no sería de extrañar que este duelo se disputará como si de una auténtica final se tratara.
Es cierto que son tan solo 2 puntos en juego de los 46 que se disputan en liga, pero el que de un paso adelante en esta jornada habrá avanzado mucho, más en el caso de las cántabras, que el siguiente partido reciben al inalcanzable Itxako Navarra.
Las rojillas han partido con la baja de Vero Verdú, que en las próximas horas es posible que sea intervenida quirúrgicamente de su lesión. Sería bonito que sus compañeras hiciesen un esfuerzo todavía más grande a sumar a su gran actitud durante toda la temporada para dedicarle un buen resultado a su compañera lesionada. Seguro que por ganas no va a ser por parte de las castreñas.