El partido que disputó el Castro en San Sebastián contra el Bera Bera dejó una nueva derrota a las rojillas por 33 a 25 tras un partido que se mostró igualado durante los primeros 40 minutos. A pesar que las locales siempre llevaron el dominio en el marcador, el Castro no cejaba en su empeño de sacar un buen resultado en Bidebieta, manteniéndose en desventajas insignificantes que le daban un plus de motivación para sacar algo positivo.
En un partido en el que los ataques se impusieron a las defensas, al descanso las cántabras se iban con desventaja de 2 goles (17-15), y al inicio de la segunda parte estuvieron a un gol de diferencia durante los primeros 10 minutos y con varias opciones de lograr el empate, pero esto no sucedió, y las locales empezaron a abrir brecha hasta el 33 a 25 coincidiendo unos minutos en las que les salió todo, mientras el Castro no lograba perforar la meta contraria.
Como anécdota, la técnico del Bera Bera se permitió el “lujo” de pedir tiempo muerto a falta de 3 minutos para acabar el partido cuando ganaban de 7 goles, con lo que añadido a lo sucedido entre semana justo 48 horas antes del partido de anunciar que la castreña Vero Cuña se iba a su equipo, han dejado las relaciones entre clubs completamente rotas.
Como muestra, el presidente del Castro José Ucelay, se pagó su entrada y no fue al palco sentándose entre el público para seguir el partido porque según él, “no merece la pena mezclarse con este tipo de gente, que te van de una manera y luego actúan de otra. Esto es muy largo y aunque no hayamos empatado con nadie y seamos nuevos en la categoría la cara no la tenemos pintada”.