jueves. 28.11.2024

La gráfica de la población que habita las mejores traineras del Cantábrico sigue la tendencia de la que muestra la sociedad. La famosa pirámide invertida. Veteranos remeros van ensanchando la cúspide mientras que cada vez menos novedades ocupan la base. San Pedro cuenta con la media más baja de las tripulaciones de la tanda de honor del domingo, 28,5 años. Kaiku eleva su edad media hasta 30,07, Hondarribia hasta 30,3 y Castro cuenta con la trainera más veterana, con 33,3 años de media. Los cuatro quedan lejos de la juventud de Orio, 26,9 años.


Los entrenadores de las cuatro embarcaciones que se juegan la bandera el domingo pertenecen a esa ancha cúspide de la pirámide sociológica del remo. Cuatro viejos conocidos que ya han coincidido como rivales en la mejor tanda del Cantábrico en 1993, 1995 y 1997. Aitor Balda se llevó el trapo con San Pedro en la primera ocasión, Juan Mari Etxabe triunfó con Donibaneko dos años más tarde y tanto José Luis Korta como Mikel Orbañanos ganaron la bandera de 1997 con Orio. El domingo, el desempate.

JOSÉ LUIS KORTA | Entrenador de Kaiku

"En Orio tuve a una cuadrilla histórica"

El de Ortzaika puede escribir libros de la experiencia que atesora. En sus capítulos se repetirían los nombres de Mikel Orbañanos, Aitor Balda y, sobre todo, Juan Mari Etxabe. El domingo «confío en mantener la renta y llevarnos La Concha pero tengo claro que gane quien gane va a tener que remar mucho y bien». Su principal rival será Castro. Dirigido por Juan Mari Etxabe, viejo conocido, contario en los enfrentamientos de rosas contra amarillos de los noventa y compañero en el Castro de 2005 y 2006.

Tras su paso por Lasarte-Michelín, Kaiku y Zierbena, Korta volvió a Orio en 1992. A partir de aquel año mantuvo pulsos deportivos de la máxima altura con los dos clubes pasaitarras. Recuerda a Juan Mari Etxabe como «un ankeko con una capacidad extraordinaria. Nos acercábamos a la embarcación rosa y pegaba un cambio de ritmo espectacular. Le padecí toda la década, especialmente en la Bandera de 1995 que nos ganaron. Le fiché para Castro y con él batimos el récord en 2006. Luego el ambiente se enfrió con mi marcha y su relevo como entrenador, pero más por el entorno que por nosotros».

De Mikel Orbañanos recuerda «aquel chavalín que hacía una pareja formidable con Altxerri en banco móvil. Lo tuve conmigo en Orio y tenía muchas cualidades pero sobre todo ganas. Era parte de una cuadrilla histórica con la que ganamos las Conchas de 1996, 1997 y 1998. Y ahora sólo hace falta ver cómo lleva la trainera de Hondarribia. Él es parte del ambiente que se ha creado en el pueblo entorno al remo. Da envidia ver cómo viven el verde allí».

JUAN MARI ETXABE | Entrenador de Castro

"El verdadero pique era con San Pedro"

Cambió de ser un portentoso ankeko a lidiar con el vestuario más laureado del Cantábrico. Conoce bien a su principal rival para llevarse la Bandera, José Luis Korta y su nuevo Kaiku. «Hasta que me llamó en 2005 no tuve otra relación que el pique deportivo entre Orio y Donibaneko. Me acuerdo especialmente de la edición de 1992. Con Korta de patrón tuvimos nuestros más y nuestros menos y nos ganaron por dos segundos. Nos tomamos la revancha en 1995. Ellos llegaban de claros favoritos y les superamos. Imagínate cómo se pondría. Tenían una cuadrilla de mucha calidad, incluyendo a Mikel Orbañanos. Hicimos buena relación cuando me llevó a Castro y estuve a gusto a sus órdenes. Luego yo me quedé como entrenador y él se marchó pero sigo teniendo un trato correcto. Más que entre nosotros las diferencias han surgido entre los aficionados».

Respecto a Aitor Balda recuerda «no sólo el pique deportivo sino el extradeportivo. San Juan y San Pedro eran entonces rivales a muerte. Orio nos inquietaba por su nivel pero la verdadera preocupación y obsesión era San Pedro».

AITOR BALDA | Entrenador de San Pedro

"Antes había menos cambios que ahora"

Al otro lado de la bahía, Aitor Balda también rescata de la memoria pasadizos protagonizados por el pique pasaitarra. «En 1993 la primera jornada fue espectacular con récord incluído, 19:23.57. Batimos a Donibaneko por dos segundos en una jornada de viento sur en la que nos tocó la calle tres y a ellos la uno, que era mejor. Fue un duelo a morir porque se nos echaban encima, quiénes y ellos. Fueron años bonitos en los que sanjuandarras, oriotarras y nosotros nos repartíamos el pastel. Y siempre éramos los mismos. Antes había menos cambios que ahora en las tripulaciones».

Reconoce que ahora muchos de los remeros de entonces «siguen siendo protagonistas aquí y allí. En el 2004 de Urdaibai coincidí con Alexander Esteban y Juan Mari Etxabe, ahora en Castro, con Aizperro, ahora en Orio y con Aitzol Arrizabalaga, hoy en Kaiku. Todos, rivales este domingo». Entiende que gente que ya va cumpliendo siga en el remo porque «por un lado están ganando banderas y por otro, dinero». Aunque asegura que «yo ya no, ya no sigo más».

MIKEL ORBAÑANOS | Entrenador de Hondarribia

"Los inicios en Orio fueron muy bonitos"

Formado en Orio, bajo las órdenes de José Luis Korta, el míster de la Ama Guadalupekoa confiesa tener muy buenos recuerdos de los años en los que se enfrentó a los dos colegas que tendrá por rivales el domingo, «con los que guardo buena relación fuera del agua. Los inicios de Orio fueron bonitos. Viví buenas experiencias y aprendí con José Luis parte de lo que sé de este oficio, aunque creo que como se adquieren conocimientos de verdad es experimentando y aplicando las cosas que te van pasando».

Compartió las tres Conchas de Orio de los años 1996, 1997 y 1998 con José Luis Korta, y una cuarta más con Aizperro, la de Hondarribia de 2005. «No es tan extraño que estemos los mismos. Es difícil que un remero nuevo dé un nivel como para ganar banderas en sus inicios y hoy no hay demasiada gente que tenga la paciencia para pasar esos cuatro o cinco años curtiéndose antes de llegar a la élite. Los veteranos también estamos viendo que el remo cobra importancia y eso hace más difícil que lo dejemos».

Cuatro trayectorias cruzadas en la Bandera de La Concha