Después de dos partidos consecutivos en el Peru Zaballa y cuatro jornadas sin conocer la derrota, el CFS Castro Urdiales volvía a la carretera para afrontar otro desplazamiento largo, en concreto a Zaragoza donde iba a medirse al Tauste FS a partir de las 18 horas.
La expedición rojilla partía hoy sábado a las 13.15 horas. Pero a los pocos kilómetros, el conductor detectó que algo iba mal en el vehículo y se detuvo en la estación de servicio de Ugaldebieta. El autobús dejó de funcionar por un fallo eléctrico.
A los pocos minutos llegaba hasta el lugar un nuevo autobús de reemplazo para transportar a los jugadores hasta Zaragoza. Todo parecía listo para reemprender la marcha... pero la avería había afectado al sistema de apertura del compartimento de equipajes y era imposible acceder a los uniformes, fichas, etc, sin los cuales no podían disputar el partido.
Pese a la predisposición del equipo rival de retrasar la hora de inicio del partido para dar tiempo a la llegada de los castreños (primero a las 20:00, luego a las 21:00...) no hubo forma de abrir las puertas hasta las 18:30. La apertura del maletero se producía tan solo unos minutos después de que la expedición partiera de vuelta a Castro Urdiales, resignada al comprobar que no llegarían a tiempo al partido.
El partido fue suspendido, y quedará en manos del comité la decisión correspondiente, si bien es muy posible que el partido pueda jugarse en otra fecha debido a la fuerza mayor del incidente.