Después de vivir con intensidad la jornada del miedo, la regata clasificatoria, los afortunados que lograron un tiempo merecedor de estar entre los siete primeros, preparan con mimo y detalle las dos regatas de los dos próximos domingos.
La jornada del jueves sirvió para aumentar el número de dudas que tienen los aficionados en cuanto al favoritismo de unos y otros. Esta claro que con el corazón cada cual arrima el pronóstico a su barco. Si bien llegado el momento del desenlace final hace falta tener la cabeza fría y para acercarse al resultado correcto.
La actuación el jueves de los siete clasificados, Urdaibai, Orio, San Pedro, Astillero, Castro, Hondarribia, Tirán pone de manifiesto luces y sombras.
Todos los barcos pudieron sentar en las bancadas a los mejores remeros olvidándose de los cupos. Pero sólo los respectivos técnicos conocen cual ha sido el rendimiento de su embarcación. Hay algunos datos que no se ajustan a un normal desarrollo. Hay tiempos que no coinciden con la realidad de las embarcaciones . Parece como si algunos hayan querido dar una demostración de poderío y que otros una vez asegurada la clasificación, después del primer largo, hayan regulado su trabajo para guardarse alguna sorpresa para las citas decisivas.
En el caso de los barcos cántabros, Astillero a mitad del recorrido era el segundo mejor registro, sólo superado en tres segundos por Orio y aventajando en otros tantos a Urdaibai, mientras que Castro cedía ocho segundos con los azules.
Segundo largo
Una vez realizada la ciaboga, con la boga popa a la ola, los de Bermeo realizaron un largo sobresaliente logrando distanciar a Astillero en dieciséis segundos a Orio en ocho y a Castro en doce.
Los astillerenses en el largo de vuelta fueron el peor tiempo con Hondarribia, mientras que los de Urdaibai, San Pedro y Castro fueron los mejores.
Cada regata es diferente y los factores naturales, sobre todos el viento y oleaje, influyen en el que hacer de las embarcaciones. El jueves todos remaron en las mismas condiciones, o regularon al máximo y con acierto, jugando con fuego, o por el contrario en el segundo largo, camino de la baliza de meta, algunos acusaron el esfuerzo del alto rendimiento ofrecido en los 2.778 metros del primer largo.
Las series del domingo
Mientras se procedía al sorteo de la composición de las tandas del domingo los clubes esperaban un resultado favorable. Todos deseaban remar en la primera serie. En la bahía de La Concha el viento tiende a aumentar de intensidad a partir de mediodía perjudicando la remada a las embarcaciones de la segunda tanda.
Una vez desarrollado el sorteo quedó patente el disgusto, por su suerte, de los cuatro primeros de la liga San Miguel, Urdaibai, Castro, Orio y San Pedro que bogarán en la segundo de los grupos. Los grandes beneficiados, lo deberán demostrar en el agua, Astillero, Hondarribia, Tirán y Donostiarra con un buen resultado.
Los azules tendrán como referencia a Hondarribia. En su último enfrentamiento los de José Manuel Francisco terminaron con una ventaja de veinte segundos sobre los verdes y catorce a Urdaibai. Esto sucedió en aguas de Brazomar, en el campeonato de España de triste recuerdo para los castreños. 'La Marinera' después de la regata del jueves ha vuelto a levantar el ánimo a los suyos y cuenta para el pronóstico final. La prueba esta muy abierta y ninguno puede sacar pecho.
Extraído de: eldiariomontanes.es