La Sociedad Cultural y Deportiva de Ribadesella ha triunfado en el XXXVIII Descenso Internacional del Río Deva, disputado el pasado domingo entre las localidades de Panes (Peñamellera Baja) y Unquera-Bustio (Val de San Vicente-Ribadedeva). Los palistas Kiko Vega y Pedro Gutiérrez, en K-2, y Walter Bouzán, en K-1, coparon lo más alto del podio en las categorías reinas.
En K-1 femenino, la mejor fue Ana González Balmaseda, de Kayak Castro Urdiales.
Un éxito con anticipo, porque esta fiesta cántabra de las piraguas, declarada de interés turístico regional, había arrancado la víspera, el sábado 30, con la regata de K-4 Ayuntamiento de Val de San Vicente, que también se llevaron los piragüistas de la SCD Ribadesella. Una prueba que llevaba ocho años sin disputarse y en cuya reedición se impuso el remo asturiano. El equipo riosellano fue primero y el Náutico Ensidesa segundo, ocupando la tercera plaza el club cántabro Piragüismo Colindres. Una nueva puesta de largo respaldada por una terna de autoridades encabezada por la ministra de Administraciones Públicas y diputada por Cantabria Elena Salgado, quien asistió a la entrega de premios para dar el suyo al equipo de Ribadesella.
La jornada había comenzado dos horas antes con la disputa de otra prueba, en este caso una que lleva veinte años sin caerse del calendario: la regata Santos Mártires para categorías inferiores, que contó con la participación de unos trescientos infantiles y alevines.
Y la cita reina del fin de semana cumplió 38 años. El Descenso Internacional del Río Deva fue un éxito de participación con 192 piraguas y 324 palistas regionales, nacionales e internacionales. La prueba del domingo arrancaba a mediodía a pie de río en la vega de La Brañona, en Panes. Por delante, un recorrido de 11 kilómetros hasta la meta, colocada en el puente del ferrocarril en Unquera (Cantabria). Las paladas que comenzaron marcando el ritmo de cabeza fueron las del equipo local, el Deva Tcone Pindal, integrado por Fernando Franco e Iván Estrada, seguidos muy de cerca por el K-2 de Kiko Vega y Pedro Gutiérrez y el de la selección argentina, con Néstor Pinta y Martín Mozzicafreddo.
Un trío de ganadores cuyo sitio en el podio quedaría definitivamente resuelto al llegar el K-2 de Ribadesella a la altura de la vega de Molleda y cruzar la línea de meta en un tiempo de 48 minutos. El equipo de Argentina lo hizo en 49 minutos y 8 segundos, y el local, en 49.49. La cuarta plaza la ocuparon Andrés Cangas y Adrián Bouzán, del club El Sella. En K-2 junior, el triunfo fue para el equipo Villaviciosa El Gaitero, de Rodrigo Hortal y Adrián Mallo. En K-1 se proclamó campeón Walter Bouzán (SCD Ribadesella), con un tiempo de 51.40. Rafael Carril (Villaviciosa El Gaitero) y Óscar Hernández (SCD Ribadesella) fueron segundo y tercero respectivamente.
En el resto de las categorías también cabe mencionar el triunfo de Mario Sánchez y Alberto Aranda (SCD Ribadesella) en K-2 cadete, y el de Siro González (Piragüismo Astur) en K-1 veteranos.
La edición 2008 del Descenso Internacional del Río Deva ha contado con el patrocinio del Plan de Dinamización del Bajo Deva, que comparte la primera mancomunidad de España integrada por municipios de distintas comunidades autónomas, el cántabro de Val de San Vicente y el asturiano de Ribadedeva, ambos representados por sus alcaldes en la gala de entrega de premios con la que se cerró la doble jornada de piragüismo en el río Deva que se hace coincidir, cada año, con la celebración de los Santos Mártires.