Los gestos de Gaizka Garmendia, patrón de la Libia, durante los últimos 200 metros de regata simbolizaron ayer el espíritu y la identidad de la tripulación que hacía historia en Portugalete. El triunfo de la perseverancia y de la superación tres temporadas después. Señales de rabia con emoción contenida salían de sus gritos y gestos. Repetía la seña victoriosa de brazos arriba, hacia la proa, con el puño en alto mientras su tripulación obedecía a sus ademanes con paladas elegantes y llenas de potencia.
Como un director de orquesta al que su banda de músicos sigue el ritmo. Y cuando termina la pieza, ovación. Abrazos, juramentos de desahogo, muecas de ilusión y mucha alegría. Sólo ellos saben el valor que encierra esta gran victoria, ante lo mejor de lo mejor. Ellos han tejido hilo a hilo, a base de esfuerzo y pundonor, por encima de las dificultades, esa bandera que agitó ayer el patrón zarauztarra.
Los de Aitor Balda habían avisado la víspera en Bilbao. Ya lo dijo Juan Mari Etxabe, entrenador de Castro: «San Pedro ha demostrado que también está por encima del resto de tripulaciones y habrá que tenerles muy en cuenta». Los pasaitarras fueron los únicos que inquietaron a esa gran selección, con lo mejor de cada casa, en la jornada inaugural de la ACT. Y ayer, la inquietud se convirtió en impotencia. La Marinera aguantó como pudo el empuje de una Libia lanzada hacia su primera bandera en la Liga San Miguel, pero tuvo que desistir a partir de la mitad de regata.
La calle cuatro, la buena
En el tercer largo los guipuzcoanos ofrecieron el mejor recital de su repertorio. Río abajo, burlaron la marea que subía por esa calle cuatro que permitía evitar, dentro de lo que cabe, la corriente en contra. Paladas alegres, bien acompasadas y con potencia. Avanzando más rápido que el resto, cada vez más lejos, mientras las traineras de Hondarribia y Castro, por las calles dos y tres respectivamente optaban por escorarse hacia la calle cuatro y sucumbir a la estela de los dueños y señores de la regata. Detrás de los campeones, como en una escala de jerarquías.
A partir de ese punto, trece remeros y un patrón se pusieron morados. Se gustaron remando y confirmaron el paso de una revelación a una realidad. Los pasaitarras no acusaron, además, los cuatro cambios que realizó su entrenador respecto a la jornada anterior. Aitor Balda expresaba que «ya sabíamos que podíamos estar ahí desde que nos probamos en los descensos de pretemporada. El de Orio, por ejemplo, nos enseñó el camino. La primera mitad de la regata no hemos ido tan cómodos, pero a partir de la segunda ciaboga hemos aprovechado la pequeña ventaja de la calle cuatro para marcharnos y hemos aguantado bien».
En cuanto a sus rivales, Castro demostró estar un punto por encima del resto. Se mantuvo casi a la par de la Libia hasta la mitad de la prueba a pesar de no contar con la mejor calle, la tres. Aventajó en trece segundos a Zarautz y en 18 a Meira, embarcaciones que bogaron por su misma calle en las tandas anteriores. Y también presumió de plantila al hacer cuatro cambios respecto a la victoria de la víspera.
Hondarribia fue otra vez la sorpresa positiva de la jornada y se consolidó en ese tercer puesto conseguido la víspera. Los de Mikel Orbañanos tampoco tuvieron ayer suerte en el reparto de calles pero vencieron a las dificultades de la calle dos con una inteligente dirección de Joseba Amunarriz. La Ama Guadalupekoa varió su trazado hasta casi la calle cuatro en el tercer largo y tras una ciaboga de diez salieron lanzados del último giro. Tanto que pusieron contra las cuerdas a Castro en un cuarto largo en el que fueron los mejores en el cómputo de las doce traineras. Dos terceros puestos en las dos primeras regatas, y con cinco cambios de un día a otro, invitan al optimismo en la familia verde.
Zumaia, reforzada
Otros que salen con la cabeza bien alto del fin de semana son los miembros del Zumaiako Arraun Elkartea. La Telmo Deun fue ayer quinta y partirá a Galicia en la zona templada de la clasificación, en el sexto puesto. Los de Luis Mari Olasagasti Luxia supieron aprovechar la ventaja de la calle cuatro e incluso plantaron cara a los vigentes campeones de la liga, los remeros de Urdaibai. En una trepidante segunda tanda, la Bou Bizkaia no pudo despegarse de los zumiarras hasta el último largo.
Entonces sí, los de Fran González demostraron que mantienen su potencial y se marcharon mientras por detrás se libraba la batalla más emocionante del día. Orio se metió en la calle dos de los vizcaínos y fue remontando hasta llegar a la par de Zumaia mientras Zarautz tampoco cedía. Los tres guipuzcoanos ocupaban la parte central de la ría. Acurrucados. Las centésimas jugaron a favor de Zumaia en una guerra en la entró también un Kaiku resucitado.
CLASIFICACIÓN:
1 San Pedro Ecolmare 19:04,88
2 Castro 19:13,77
3 Hondarribia 19:16,76
4 Urdaibai Umpro Avia 19:17,89
5 Zumaia Altuna y Uria 19:24,18
6 Kaiku 19:24,57
7 Candy ORIO G.Eibar 19:24,97
8 Zarautz Inmob. Orio 19:26,87
9 Pedreña 19:29,19
10 Tiran Pereira 19:30,91
11 Samertolameu 19:31,52
12 Arkote 19:38,44 00:33,56
CLASIFICACIÓN LIGA SAN MIGUEL:
Extraído de: diariovasco.com