Una manada de aguiluchos irrumpió ayer en el atardecer de Pasaia volando a ras del agua. La Mirotza cruzó la meta del Descenso de San Pedro más rápido que el resto de traineras. Con otra alegría. Como si la corriente de aire fino que entraba desde el mar en el embudo de la bahía pasaitarra se aliara con ella. Orio realizó una regata de menos a más. Marcó dos segundos más que los locales de San Pedro en el primer paso por meta, tras salir hasta puntas, saludar a una mar traviesa, girar y pasar por la línea de salida habitual en la regata de ACT. En el recorrido de entrada en la bahía y vuelta hacia el punto de partida ya habían igualado a los morados. Y en la parte final del recorrido impusieron la ley del más fuerte. Su patrón, Irakoitz Etxeberría, atribuía el buen tiempo final a la calma que habían conseguido mantener sus pupilos. «Hemos remado con cabeza, sin perder los papeles. En el descenso de casa no conseguimos competir con esa tranquilidad y no nos quedamos a gusto. Cuando gozamos cada palada, al bote se le ve más suelto. Y eso hemos conseguido en Pasaia».
Los amarillos salieron a por todas y con una alineación de lujo. Completaron la banda de estribor Gorka Etxeberria, Aitor Olaskoaga, Fernando Valenciaga, Alain Colunga, Unai Etxeberria y Aritz Etxebeste. En babor bogaron Iñigo Mujika, Joxean Olaskoaga Aizperro, Anartz Larrea, Manuel Lasarte, Josu Indo y Andoni Peña. Urko Redondo ejerció de proel e Irakoitz Etxeberria de patrón.
Aizperro ya reconocía, antes de saber cualquier referencia, que su tripulación había terminado fuerte. «Hemos llegado bien a los últimos metros», confirmaba con sonrisa de satisfacción. «Se hacía un poco más duro hacia afuera, con un último tramo un poco sucio y viento en contra», explicaba. A la buena condición física demostrada en los últimos minutos de regata la embarcación amarilla añadió el impulso de las olas que entraban en la zona de la ciaboga exterior. Todo de cara para una tarde en la que, como bromeaba algún aguilucho, «les devolvemos la victoria que nos quitaron en Orio».
San Pedro no pudo ofrecer a su afición una victoria, pero se mantuvo en tiempos de éxito hasta el último tramo de regata y ofreció una sensación de tripulación sólida. Los anfitriones quisieron apostar con un bote preparado para aguas más tranquilas, y el movimiento del mar entrante, mayor del esperado, desbarató en parte sus planes. «Para eso está la pretemporada», concluía un integrane de la Libia.
Gaizka Garmendia fue el patrón de los morados, con Urko Kortajarena, Jose Mari Intxausti, Iñaki Arrieta, Jon Ander Obiñeta, Aitor Balda y Joseba Etxabe en la banda de estribor. En babor remaron Alex Udabe, Iñigo Osa, Garikoitz Lopetegi, Asier Carballeda, Joseba Larrarte y Gabi Larrínaga, con Ander Ansa de proel.
Hondarribia fue el tercero, ya lejos de las referencias válidas para entrar en la disputa de la regata. La Ama Guadalupekoa dejó fuera a algunos de sus pilares que compiten en banco móvil. Gorka Puertas, Beñat Elzo, Arkaitz Goñi, los hermanos Vertiz o el propio Mikel Orbañanos no compitieron en el día de ayer.
CLASIFICACIÓN:
Extraído de: diariovasco.com
