El reinado de la mejor liga del Cantábrico se ampliará hasta La Concha los dos próximos domingos. La ACT conquistó ayer un enclave estratégico en el panorama arraunlari y protagonizará en bloque, junto a la Donostiarra, las dos regatas más célebres del verano. Variando el orden, pero las siete mejores traineras de la Liga San Miguel fueron ayer las siete mejores también de ese pelotón de 24 participantes que aspiraban a clasificarse para La Concha.
Las primeros fueron los últimos. O alrevés. Como prefiera cada uno, pero Kaiku invierte cualquier orden cuando introduce en la Bizkaitarra sus trece remeros titulares. La combinación del éxito. Los de José Luis Korta obtuvieron además unas diferencias que darán que hablar en los próximos días, 16 segundos al segundo y más de medio minuto al séptimo. Y todos fueron a bloque.
Urdaibai redondeó la fiesta vizcaína en la capital guipuzcoana. Marcó el tercer mejor tiempo hacia fuera y su vuelta recordó a la Bou Bizkaia que ganó la ACT el año pasado. Los de Iker Zabala fueron los grandes triunfadores de la jornada. Salen reforzados y vuelven al mapa de los favoritismos.
Orio y Castro también entraron con holgura. Ambos en el mismo segundo. La Marinera giró sexta en la ciaboga, en el mismo segundo que Pedreña, séptimo. Las olas en alta mar zarandearon por unos minutos los pronósticos, pero los favoritos no fallaron en popare. A la Mirotza se le escaparon un par de olas en el largo de vuelta pero ya habían dejado claro en la primera mitad de la regata que había potencial para estar en la regata más importante del año.
Pedreña cumplió, pero necesitó prórroga. En la ciaboga era séptimo y a la altura de la barra marcaba el mismo tiempo que Zarautz. La entrada en la bahía fue, sin embargo, triunfal, y la Marina de Cudeyo confirmó que es una de las embarcaciones preferidas por las olas.
San Pedro, segundo en la ciaboga, confirmó que tiene potencial físico para estar a la altura del mejor hacia fuera. Le costó algo más volver pero no pasó apuros para clasificarse entre los siete.
Hondarribia, por los pelos.
La favorita que más cerca vio el disgusto fue Hondarribia. En el primer largo hizo gala del momento de forma que atraviesa, el mejor de la temporada. Pero fue en el terreno en el que teóricamente mejor se desenvuelve, hacia adentro y con mala mar, donde no terminó de acertar y apunto estuvo de pagarlo caro.
A dos segundos se quedaron Zarautz y Astillero. Empatados a segundos, y a centésimas, aunque con diferente sabor. Agridulce en el caso de la Enbata, que no llegaba a la clasificatoria con la preparación óptima que hubiera deseado su míster tras varios problemas con las lesiones. Amargo para los cántabros, que llegaban a Donostia dentro de la quiniela de siete más extendida en el mundillo. Los de José Manuel De Francisco ya estaban fuera en la ciaboga tras un largo en el que la San José XIV votó más de la cuenta y avanzó a trompicones. A la vuelta el corazón empujó más que los brazos y riñones. Al final, los segundos pesaron sobre las cabezas, agachadas, de Astillero.
Entre los que no consiguieron entrar en el selecto club de siete también hubo satisfacciones. Pasai Donibane fue décimo tras un test del que extraen conclusiones positivas para el play-off de ascenso a la ACT que disputará el 19 y 20 de septiembre en Bermeo y Portugalete.
Una tanda, de honor
Tras la contrarreloj se procedió a celebrar el sorteo de tandas para la regata del domingo. La segunda fue la que más resoplidos provocó en el Ayuntamiento. La de honor, bautizaron muchos.
Kaiku, Castro, Orio y San Pedro bogarán en ella. Los dos primeros encabezan la lista de favoritos.
En la primera remarán la Donostiarra, Urdaibai, Hondarribia y Pedreña. La ACT más la Donostiarra.
Mutriku, campeonato de Bizkaia, Euskadi, España y... ¿La Concha?
Kaiku volvió a remar ayer con la alineación de los días de guardar. La de los domingos. Esa tripulación de gala que ha escondido con mimo José Luis Korta desde que la descubrió en la Ikurriña de Mutriku en el mes de junio. Sin querer, según él.
Las normas, ésas que responden a intereses partidistas y no buscan el beneficio del remo, según el hombre más feliz ayer en la rampa de los sueños, han mantenido a a ese engranaje imbatible fuera de la competición durante buena parte del verano. Sus piezas han ido rotando en un mecanismo de la misma marca, Kaiku, pero sin el mismo motor. El míster de Ortzaika, sin embargo, ha ido puliendo el conjunto en privado, frotándose las manos y contando las horas para exhibir en público semejante potencial.
Había dejado que viéramos algunos destellos en el campeonato de Bizkaia, el de Euskadi y el de España, tres títulos que fueron a parar a Sestao. Y ayer aprovechó el mejor escaparate del Cantábrico para lucirlo. Volvió a cautivar a los aficionados y a atemorizar a sus rivales. No habrá que esperar tanto para volver a comprobar su capacidad. El domingo. Ya de favoritos.
Fuerza y habilidad
Las trece teclas del éxito hicieron sonar ayer la misma melodía triunfal de otras veces, pero con más brillo si cabe. La Bizkaitarra surcó las aguas donostiarras hacia afuera sin acusar la oposición de un mar que quiso poner a prueba la habilidad de las traineras. Las olas pasaban y el bote avanzaba al margen de ellas.
Las marginó en el primer largo pero las mimó como nadie en el segundo. Desbarató así las esperanzas de quienes pensaban que su éxito se basaba exclusivamente en la potencia de sus vatios. A la vuelta sacó nueve segundos a Castro, la siguiente embarcación más rápida en popare.
En Sestao y media Vizcaya ya empiezan a aprenderse de carrerilla los trece nombres que asocian al triunfo. Miguel Ángel Ruiz, Javier Pérez, Federico Steindl, Luciano Prego, Leandro Salvagno, Ángel Mari Rodriguez, Benito San Martín, Óscar Andrés Medina, Aitzol Arrizabalaga, Iñaki Errasti, Gentza Zubiri, Iker Pascual y Óscar Gómez, patroneados por Asier Zurinaga.
Suenan a alineación histórica. Ésa que se recordará como la que ganó aquella histórica bandera. ¿La de La Concha de 2009? De momento sólo han accedido a la parrilla de salida, pero tienen entre ceja y ceja la bandera más grande y en lo que va de temporada, donde han puesto el ojo...
El estrés no es malo
A pesar de que en un momento los monitores nos quisieron hacer pensar lo contrario con el tiempo que atribuyeron a Astillero en la ciaboga, el cronómetro lo confirmó. Ratificó que la mejor competición del Cantábrico, la ACT, con su dosis de exigencia semanal, aporta un plus a las traineras que compiten en ella.
El ritmo de una Liga que obliga a las tripulaciones a sacar lo mejor de sí durante más de dos meses, lejos de provocar efectos secundarios adversos en los remeros, garantiza un nivel medio muy alto. Que se lo pregunten si no a Urdaibai. La calidad de los de Bermeo no ha sido suficiente durante la competición regular para asomar la proa por la tanda de honor.
La percepción subjetiva de un club destinado a ocupar posiciones en la élite del remo ha sido durante muchos momentos de la temporada de impotencia y debilidad. Pocos segundos pero muchos puestos. Negatividad en el ambiente.
En el otro lado de la balanza se encuentra Astillero. Ha nadado en la Liga ARC 1 en esas sensaciones donde hasta los errores parecen ser perdonados y los despistes, corregidos automáticamente. Sin las apreturas de los segundos arriba abajo. Siempre por delante, a más a menos distancia. Superiores al resto de rivales, era la conclusión. Algunas teorías les otorgaban como ventaja la tranquilidad de poder preparar una cita puntual como La Concha alejados del estrés de la ACT. Con un plan dirigido especialmente a un objetivo. Ni las pizarras aumentan el rendimiento, ni la teoría reduce los segundos, ni el estrés es tan malo. O por lo menos eso es lo que parece tras lo visto ayer.
CLASIFICACIÓN
Tandas para el domingo día 6
Extraído de: diariovasco.com