viernes. 29.11.2024

Con la decisión de la Sociedad Deportiva de Remo de Castro Urdiales de “colgar” definitivamente la trainera B, un reducido grupo de remeros componentes de esta trainera se ve abocado a tener que dejar de remar en contra de su voluntad. Su única pretensión es seguir remando y formándose como remeros, y en las condiciones que han quedado, esto es prácticamente imposible, pues las normas vigentes en la ARC-1, ARC-2, y ACT, exigen que para que estos chavales puedan seguir remando en otro club, este debe de pagar unos derechos de formación sobre ellos. Es el caso de Adrián, Jesús y Pablo, que tienen la oportunidad de poder remar en Colindres, pero que esto será prácticamente imposible si el club castreño exige estos derechos como esta establecido en los reglamentos. 

Su último recurso para intentar poder seguir remando, ha sido ponerse en contacto con esta casa para hacerse oír y pedirle por favor al club, que ya que no pueden seguir remando en Castro, no se les ponga ningún impedimento para que estos puedan seguir remando en otro club, solo piden eso, poder seguir remando y formándose como remeros, y quién sabe, quizás algún día, poder volver al club de sus sueños y triunfar en él.
 
“Tuve la mala suerte de salir del club cuando Castro triunfó en la ARC y ganó la liga en el 2007, Fui cedido a Colindres porque la plantilla que tenia Pedro Gabancho era amplia y con muy buena gente, gente nueva que tenia ilusión por remar. Pero me fui de buen agrado porque yo también tenía ilusión por remar y sabía que el próximo año tendría la oportunidad de volver y remar en Castro, que es lo que a todos nos gusta. Fue una temporada dura, ver con envidia sana como mis compañeros triunfaban regata tras regata, y yo sufría como un perro para poder terminar las regatas, pero no me importaba, en todas las regatas yo oía como amigos y familiares de los remeros de La Marinera B chillaban y coreaban el apellido Linaza, y eso me daba ánimos para seguir”, nos relata Pablo.
 
“Tuve un compañero que a menudo me decía, ¿Pablo? ¡La gloria no esta en caerse, la gloria esta en volver a levantarse! Este año he entrenado duro y cuando llega lo mejor, disfrutar en las regatas, resulta que lo tenemos que dejar” “Esto es muy injusto”, nos vuelve a comentar el bueno de Pablo.
.
 
Adrián es otro de los remeros que se encuentra en la misma situación. También tiene oportunidad de remar en Colindres, pero la normativa de la ARC le impide hacerlo al tener que pagar este club unos derechos de formación por él. “Qué culpa tenemos nosotros de las condiciones que se ponen en los reglamentos. Esto lo único que hace es joder a los remeros que nos estamos formando. Lo veo bien en remeros que están formados y que el club se ha gastado una pasta y ha pagado unas fichas por ellos, ¿pero por nosotros? Estamos entrenando en Colindres, pero el día 20 empieza la liga y Colindres no puede pagar ese dinero porque no lo tiene, por lo tanto nos quedaremos sin remar. Pero eso no es lo grave, lo grave es que esto seguirá el año que viene, y el otro y el otro, por lo tanto tendremos que dejar de remar definitivamente”, comenta Adrián mientras seguimos charlando.
 
Jesús, este año no tenía ficha con Castro. Empezó a entrenar en Zierbena, pero se tuvo que marchar por causas ajenas a él. También se encuentra en la misma situación, pues empezó a remar en Castro cuando se ganó la liga del 2007  y por lo tanto, el club tiene los derechos de formación. “Me gusta remar y quiero hacerlo, por eso le pido al club, por favor, que no nos ponga ningún impedimento para poder hacerlo. Tuve la gran suerte, al contrario que Pablo, de poderme quedar en el club cuando se hicieron los descartes en el 2007. Había empezado a remar en Colindres, pero ante la llamada de Pedro me vine a Castro y de alguna manera deje tirado a Colindres, ahora me gustaría devolverles el favor que me hicieron al dejarme marchar. Me costó remar mi primera regata, fue en la contra-reloj de Pasajes de San Pedro a mitad de temporada, ganamos por 26 centésimas, pero lo que experimenté fue grandioso cuando pasábamos por debajo de la afición y oíamos sus gritos. Eso me hizo coger confianza y seguir en este deporte, y lucharé con todas mis fuerzas para conseguirlo”, nos dice Jesús Arco.
 
Los tres se muestran preocupados por su situación y piden, por favor, a la Sociedad Deportiva de Remo que haga lo que este en sus manos, que lo único que se va a conseguir es que tres chavales que tienen ilusión por practicar un deporte que les gusta, tengan que dejarlo por una normativa que para nada va con ellos, al contrarío, les perjudica y mucho.

REMO / Solo queremos remar, no pedimos nada más