Al igual que en otros ámbitos, se está produciendo una democratización por no llamar revolución, a la hora de entrar a formar parte de diversos cotos, que hasta ahora se consideraban cerrados para el ciudadano de a pie.
Uno de ellos es desde hace años el mercado bursátil, donde se ha producido una popularización de esta actividad sin parangón en la historia económica de nuestro país, con un volumen de unos 9 millones de españoles operando de alguna manera en este sector.
Y es que cada vez está disponible más información sobre cómo operar en los distintos mercados, especialmente importante es la revolución en el mercado forex, el mayor mercado del mundo donde se compran y venden divisas, y también al mismo tiempo están disponibles diferentes herramientas que nos permiten operar sin ser unos expertos en la materia.
Desde el trading social, donde una red de personas unidas por esta afición comparten conocimientos sobre inversiones e incluso con la posibilidad de “copiarse” unos a otros para obtener los primeros resultados, hasta auténticos robots que realizan operaciones por nosotros en los denominados sistemas de autotrading, donde en realidad un algoritmo matemático analiza el mercado por nosotros y nos permite operar.
El sector se está revolucionando con la llegada masiva de pequeños inversores que cansados de la poca oferta para rentabilizar su dinero están buscando nuevas vías donde obtener algún beneficio. Y es que no es para menos, hablamos de mercados, como el que mencionábamos más arriba donde las posibilidades de éxito gracias al elevado factor de apalancamiento son enormes con una inversión relativamente pequeña, aunque también multiplica las posibilidades de pérdidas.
Los expertos cada día repiten los mismos consejos, sobre todo tener un conocimiento profundo de lo que vamos a hacer, formarse, no echarse a invertir a lo loco como si esto se tratara de una apuesta en un casino, apostando al rojo para ver si tenemos suerte y multiplicamos nuestro dinero. En realidad la actividad de trading es más fruto de un saber conocer el mercado para decidir correctamente cuándo y cómo, que una actividad lúdica. Tenga en cuenta que se está jugando su dinero.
Los consejos adicionales pero esenciales son que nunca emplee dinero que necesite para sobrevivir, sino que utilice siempre aquel del que pueda prescindir en caso necesario, que no empiece a operar inmediatamente sino que utilice una cuenta demo para trabajar y conocer en profundidad el mercado y luego empiece con una cuenta real y que sobre todo accede a formación bien a través de internet o bien de forma presencial y reglada, pero sobre todo entienda que está entrando en un mercado real, no en un juego y que para tener éxito hay que aprender a operar en él.
Si luego de todo esto se decide a seguir adelante, tenga en cuenta como le decíamos más arriba que existen multitud de opciones para los nuevos inversores y que le recomendamos que siga el camino que mejor se adapte a sus circunstancias, como por ejemplo el nivel de riesgo que está dispuesto a asumir, el volumen de capital que quiere poner en sus inversiones y sobre todo el tiempo que tiene para operar. Tómeselo con calma, sea disciplinado, sea valiente y sobre todo sea humilde, probablemente es el mejor consejo que le pueden dar.