Bañistas y personal de la empresa adjudicataria del servicio de limpieza, Vertresa, conviven durante las mañanas en las dos playas enclavadas en el casco urbano del municipio (Brazomar y Ostende) lo que ha levantado la protesta de los usuarios de estos arenales castreños, «por el ruido y la molestia que genera el paso de la máquina de limpieza». Estos trabajos comienzan a las seis de la mañana y finalizan entre las 10 y las 12 horas, «en función de las necesidades del servicio», según explicó el personal de la empresa de limpieza.
Algunos bañistas afirman que han visto alterada la tranquilidad de la playa por el paso de la rastrilladora pues además del ruido que provoca, «tenemos que mover la toalla y no podemos olvidar que se trata de una maquinaria que es peligrosa». En otros casos, veraneantes como Telmo Gómez consideran que el horario de la limpieza podría adelantarse y de este modo evitar el perjuicio para quienes acuden a las playas. A pesar de las vacaciones son numerosos los bañistas que acuden a la playa de Brazomar a primeras horas de la mañana.
Por su parte, Aitor Valencia, operario de la empresa del servicio de limpieza, explicó ayer que «no podemos empezar antes a hacer el trabajo porque no hay luz y hoy hemos empezado a la seis de la mañana en la playa del Matadero que esta en perfecto estado a esta hora (las nueve y media) y a las 8,30 llegábamos a Brazomar donde acabaremos pasadas las diez porque la playa está bastante limpia».
A juicio de este trabajador del servicio de limpieza, «la gente quiere que todo esté limpio rápidamente y si no limpiáramos también se quejarían». A Valencia no le sorprende que la gente madrugue mucho pues, «a las ocho y media ya hay toallas extendidas». En su opinión «el accidente que se produjo en una playa de Murcia cuando una maquina de limpieza atropelló a un bañista ha causado cierto temor entre quienes acuden a las playas ».
Por su parte, Margari Esnal, vecina de Castro Urdiales, explicó ayer que cada día «bajo a andar a la playa y no me molestan para nada las máquinas». Sin embargo exponía otra queja pues «creo que hay pocas papeleras y una sola zona de contenedores lo que no contribuye a mejorar la limpieza de la playa».
Esta vecina de Castro Urdiales denunció también que hay un único baño en la playa, pese a que «son muchos los usuarios que la frecuentan por lo que este es un tema en el que el Ayuntamiento de Castro tenía que poner más énfasis en velar por la limpieza, bienestar y la comodidad de todas las personas».
Fuente: eldiariomontanes.es