Este verano se pondrá en marcha el servicio municipal de abastecimiento de agua a la Junta Vecinal de Oriñón que ha sido subvencionado en parte por el Gobierno de Cantabria, según confirmó ayer a este periódico el edil de Desarrollo Industrial, Jaime Diez Muro (PRC). «Para que entre en vigor la nueva instalación tan sólo falta que se proceda a la colocación de una válvula» puntualizó el concejal. Hasta hoy, el sistema empleado por los vecinos para abastecerse ha sido la utilización de púas subterráneas instaladas en cada comunidad, desde las que extraían agua del suelo. Así, durante este estío, esta práctica pasará a la historia, y las casi 700 viviendas de Oriñón se suministrarán de agua traída desde Castro Urdiales que será cobrada por el Ayuntamiento, ya que la delegación del cobro del servicio de agua en pedanías sólo afecta a Santullán y Mioño, según aclaró Diez Muro.
Antes de la próxima entrada en vigor de las nuevas instalaciones de suministro, los vecinos deben colocar contadores de agua en sus viviendas para medir el consumo, una medida que se esta poniendo en practica estos días en Oriñón y Sonabia. Según Guzmán Miranda, presidente vecinal y edil no adscrito en el Ayuntamiento castreño (ex- PRC), «precisamente en Sonabia, con unos 36 vecinos, se despilfarra bastante agua, probablemente porque las viviendas con vecinos sin empadronar han aumentado sustancialmente».
Hay que recordar que en Castro Urdiales existe una normativa de ahorro de agua que ha de cumplirse y es extensiva a todas las pedanías. Diez Muro explicó que «desde el Ayuntamiento se están explorando diferentes opciones mara mejorar el servicio de agua, unas para la zona Este y otras para la zona Oeste, donde están Oriñón-Sonabia, Islares o Cerdigo, que se irán dando a conocer en los próximos días.
Preocupación vecinal
Si hasta ahora la preocupación de los vecinos de Oriñón era la salinidad del agua no apta para el consumo, que además estropeaba sus electrodomésticos, ahora parte de la población de la pedanía castreña teme que ante el caluroso verano que está comenzando, y una vez entre en funcionamiento el servicio de aguas municipal, la escasez que ha afectado a otras zonas castreñas hace dos años se extienda a ésta zona. Hasta ahora, en esta pedanía, como en otras, no se ha pagado el agua, una situación que el equipo de gobierno tripartito municipal (PRC, PP e IU) pretende resolver tanto para mejorar el servicio, como para que no haya un trato discriminatorio.
Fuente: eldiariomontanes.es