25 de julio de 2005, 14:57
El muelle de Don Luis, también conocido como el solarium, ha levantado las quejas de los bañistas que frecuentan esta zona porque el mar deja verdín en sus escaleras y parte de las barandillas han sido arrancadas los días de fuerte oleaje, por lo que el acceso al agua se hace peligroso y resbaladizo. La situación será paliada por la Dirección General de Puertos que instalará dos rampas para que los usuarios puedan entrar sin peligro al agua, entre las obras que está ejecutando este verano en el frente marítimo castreño que ascienden a unos 300.000 euros.
Fuente: eldiariomontanes.es