miércoles. 27.11.2024

La Guardia Civil de Cantabria interceptó el pasado 27 de agosto a tres varones vecinos de Castro Urdiales, tras haber realizado pesca furtiva de percebes en Islares, teniendo en su poder más de 20 kilos de este apreciado marisco.

Además de intervenir los percebes, que han sido entregados en un centro benéfico de Castro Urdiales, y los utensilios de pesca, se han formulado 14 denuncias por diferentes conceptos relacionados con la pesca furtiva y la seguridad vial.

La tarde del pasado 27 de agosto, una patrulla de la Guardia Civil de Guriezo, que se encontraba prestando servicio de seguridad ciudadana en Islares, observó una furgoneta que les infundió sospechas.

Los agentes que se encontraban al pie de la vía, la dieron el alto, aminorando la marcha la furgoneta. Al llegar a la altura de los agentes escucharon que desde el interior del vehículo decían “acelera-acelera”, emprendiendo la huida, realizando una conducción temeraria, sin hacer caso a las señales de los agentes y no respetando una señal de stop.

La furgoneta que estaba ocupada por tres hombres fue interceptada en la misma población de Islares, a unos tres kilómetros de donde se les dio el alto.

 

Más de 20 kilos de percebes

Detenido el vehículo, comprobaron que en su interior había un cubo con percebes recién pescados, un traje de neopreno y utensilios para la extracción de este tipo de marisco.

Tras diferentes pesquisas, los agentes averiguaron que estas personas venían de pescar los percebes y que dos de ellos ya habían sido denunciados en diferentes ocasiones por realizar pesca furtiva.

Finalmente los agentes confeccionan 14 informes-denuncias, de los cuales 9 están relacionadas con la pesca en zonas prohibidas, en épocas de veda, carecer de licencia o realizar capturas sin respetar la talla mínima, y 5 en materia de seguridad vial, entre otros preceptos, por conducción temeraria, no respetar las señales de los agentes o no detenerse ante una señal de stop.

Denunciados tres vecinos de Castro Urdiales por pesca ilegal de percebes y darse a la fuga