El consejero de Obras Públicas, José María Mazón, anunció el pasado lunes día 17, que en la primea semana de septiembre tendrá lugar una reunión entre la Dirección General de Puertos y el Ayuntamiento de Castro Urdiales para tratar los asuntos pendientes que han generado importantes roces y puntos de conflicto en las relaciones entre la administración regional y municipal; se trata, en concreto, de la urbanización del Parque de Amestoy, las tasas de esta obra y las cesiones de locales que el consistorio reclama en la zona portuaria y en la reordenación de la dársena cuando se ejecute.

Un encuentro que, según indicó, tendrá lugar en la localidad y al que podrían acudir los colectivos que el Ayuntamiento considere y que, como en el caso de las Asociaciones de Hostelería y Comercio, ya lo han solicitado

 

Mazón que inauguró los dos carros varaderos de San Guillén en los que su consejería ha invertido 460.000 euros, cree que se puede llegar a un entendimiento con el Ayuntamiento “si todos ponemos de nuestra parte”. El consejero aseguró que su departamento está “encantado de trabajar con Castro, con su Corporación”, aunque reconoció que el alcalde “no es el mejor interlocutor al ser un tránsfuga”.

 

El consejero de Obras Públicas, que con su visita retomó la siempre complicada línea de relaciones diplomáticas con el alcalde castreño, Fernando Muguruza, llevó consigo una infografía y los planos del diseño clásico propuesto por la consejería para la urbanización del Parque Amestoy. Según dijo, el Gobierno regional “no tiene un interés especial” en dar la última palabra, si bien estima que lo “interesante” es que el Ayuntamiento y los castreños “estén a gusto” con la opción elegida, porque será “una solución para muchos años” y porque esa zona de titularidad acabará siendo un parque público que se cederá al municipio para que realice su mantenimiento.

 

Respecto a las tasas del proyecto, que están recurridas por la vía de lo contencioso, Mazón señaló que el Ayuntamiento “no tiene ninguna razón” para reclamárselas, porque, en su opinión, el Gobierno está “exento” por la Ley de Tasas. “No se puede pretender que hagamos inversiones en el municipio y luego querer que paguemos aún cuando no nos corresponde”, censuró.

 

Estas declaraciones las realizó el consejero durante su visita al puerto para inaugurar una nueva infraestructura, cuyas obras ha ejecutado Tragsa y que han consistido en la edificación de dos nuevos carros varadero con capacidad de izado para embarcaciones de hasta 200 y 300 toneladas, respectivamente. Además, también se ha procedido a la reconstrucción de la rampa por la cual se trasladan dichos carros en las operaciones de izado y botadura de las embarcaciones. En este acto Mazón no estuvo acompañado por el alcalde de Castro. Muguruza si estuvo con Mazón minutos antes, en la visita a la Oficina de Vivienda.

 

 

El consejero de Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo también anunció que, en el plazo aproximado de un mes, volverá a Castro Urdiales para presentar la segunda fase de reordenación portuaria (puerto deportivo), y en el mismo plazo dijo que estarán listos dos proyectos que responden a sendas peticiones para la habilitación de un nuevo solarium en la zona de San Guillén, “compatible con la actividad pesquera” y para solucionar los problemas que el oleaje ocasiona en el Pabellón Náutico.

 

 

Además, Mazón visitó la Oficina de la Vivienda abierta hace dos meses y medio en los bajos del Ayuntamiento, que desde su apertura ha registrado más de 500 solicitudes de vivienda protegida. Al respecto, el alcalde Fernando Muguruza destacó la importancia de “clarificar el panorama de demandantes de vivienda” y de la presencia del consejero para poder “impulsar” los proyectos municipales para la construcción de nuevas viviendas de VPO en la zona de Sámano. Así, aprovechó la ocasión para reclamar a Mazón, a través de los medios de comunicación presentes (el consejero, apenas a un metro de distancia, se encontraba de espaldas departiendo con otros ediles de la corporación) “una mayor presencia en Castro y una mesa de debate para tratar las numerosas inquietudes que no son atendidas a pesar de las continuas demandas que le hago”. El alcalde tuvo que alzar la voz para que sus palabras llegasen al consejero. “Si tiene orejas sería bueno que lo oyera y que se diera por aludido porque es necesario sentarnos a debatir, y desde luego, el huir de mi presencia no me parece un comportamiento correcto”, criticó. A pesar del encuentro, y a la vista de las indirectas lanzadas por uno y otro político entre sí, quedó claro que las relaciones siguen siendo harto complicadas.

 

 

Tras las criticas del alcalde al consejero por la forma en la que la pasada semana comunicó su visita al municipio (vía teléfono y posterior fax), había morbo por ver si Muguruza iba a estar presente en el acto y si iba a saludar a Mazón. Respuesta afirmativa a ambas incógnitas. “¡Hola!”, le dijo. Sin embargo, no hubo entre ambos el protocolario apretón de manos, pese a que el consejero le ofreció la suya. En su lugar, el alcalde le estampó un papel cuyo encabezado, subrayado en fosforito, rezaba así: “Los médicos recomiendan saludar sin beso ni dar la mano”. En él se recogían las medidas y recomendaciones propuestas por la ministra de Sanidad para prevenir la propagación del virus de la gripe A. Ajenos a estos consejos, el resto de autoridades presentes no dudaron en estrechar manos e intercambiar protocolarios besos. Mazón reconoció posteriormente su falta de sintonía con Muguruza y con cierta sorna dijo: “No es el mejor interlocutor, pero es el alcalde; otra cosa es que tengamos que darnos besos y abrazos, que no puede ser por prescripción facultativa”.

 

Extraído de: EL MUNDO