El Grupo de Trabajo, representado por el vicepresidente Ignacio Arroyuelos, el secretario Fernando Peña y la vocal Belén Codenato San José, han dado lectura en rueda de prensa a un amplio comunicado en el cual denuncian la actitud de los partidos PSOE, AXC y el alcalde Fernando Muguruza que quieren eliminar la Junta de Gobierno de la Residencia Municipal.Dice el comunicado que el alcalde Muguruza, el Partido Socialista, Acuerdo por Castro e Izquierda Unida quieren eliminar a la Junta de Gobierno de la Residencia Municipal para que desaparezca el control sobre la gestión y pase a manos de los políticos. Todas las decisiones quedarían en manos del alcalde, que podría decidir sobre su patrimonio a su antojo. Para conseguir sus propósitos han intentado vaciar de contenido la labor de la Junta de Gobierno, no ejecutando ni cumpliendo multitud de acuerdos beneficiosos para la institución. Obstaculizándolos con artimañas políticas o bloqueándolos con argumentos más que sospechosos.
Ejemplo palmario de lo que aquí denunciamos es que la Junta de Gobierno ha solicitado en innumerables ocasiones la provisión de una plaza de Director de la Residencia y, aun existiendo partida presupuestaria habilitada para la ocasión, el Ayuntamiento, todo el Ayuntamiento, ha hecho caso omiso a esta necesidad. Metieron la pata hasta el fondo contratando a una empresa, con el voto de calidad del alcalde, durante 2 años que cobra 5.600 € al mes para un asesoramiento que podría realizarse en un mes. Hubiese costado 5.600 y ahora va a costar 5.600 x 24 = 134.400 €. Esta es la clase de gestión que tenemos en este Ayuntamiento.
Ahora amasan toda su ineficacia para tapar el desaguisado, pero lo van a tener crudo. Por su parte, el Gobierno de Cantabria tiene mala memoria y sus intenciones están poco claras. No recuerda que la Residencia Municipal le cedió más de 5.000 metros de terreno para construir un centro de día, cesión que podría haberse realizado por el ayuntamiento en otro lugar y la residencia hubiese podido vender los terrenos a buen precio y haber remodelado totalmente y con las mejores calidades todas sus dependencias. Pero cedió parte de su finca al Gobierno porque creyó que el centro de día era necesario.
El Gobierno de Cantabria tampoco recuerda que prometió que las instalaciones del centro de día podrían ser utilizadas por los residentes, algo que no ha ocurrido ni una sola vez, y allí se encuentran infrautilizadas. El Gobierno de Cantabria exigió que se realizasen unas obras para que la residencia pudiese concertar plaza y así lo hicieron. Y curiosamente ahora el Gobierno Regional se olvida de todo. ¿Por qué tiene tantas prisas, y que curiosamente, coinciden con las de sus amigos en el Ayuntamiento? ¿Cuántos años tardó en resolver la situación en la residencia de Limpias y de otros municipios? Estamos de acuerdo que la Residencia debe proveerse de un Director y es que tiene que realizar y poner al día todas las obligaciones que marca la Ley.
Como hemos indicado, la Junta de Gobierno ha pedido en varias ocasiones dotar la plaza de director y sacarla a concurso. Para que el Gobierno Regional disponga de una interlocución válida. Pero se han encontrado con la cerrazón del Presidente, el Alcalde Muguruza, y de la Vicepresidenta, la concejala Gorriarán, incapaces de comprender y aceptar soluciones razonables en beneficio de los internos. Parece que huyen de la eficacia, no vaya a resultar contagiosa. No hace falta que Dolores Gorostiaga diga que la figura del director es imprescindible para la interlocución. Hace 10 años la residencia ya tuvo un buen director, que era a la vez un gran gestor, y todo funcionaba y sobre todo sin interferencias del ayuntamiento. ¿Qué paso? Lo de siempre: al cambiar la corporación tras las elecciones de 2003, lo destituyeron y a partir de esa fecha la gestión que ha realizado el Ayuntamiento ha sido catastrófica.
Y más lo hubiera sido si algunas personas responsables no se hubieran opuesto a tanta gestión basura. Señora Gorostiaga, usted proclama que le gustan las cosas bien hechas, pero hace todo lo contrario. Nunca en la historia de Cantabria se ha gestionado un hospital de manera tan nefasta como el de Laredo. Pero usted no lo resuelve y la situación, lejos de mejorar, empeora. Por si no se ha enterado hay personas que están esperando tratamiento desde el 2009. Y muchísimas otras han tenido que acudir a la sanidad privada. Y desde luego la situación de los internos de la Residencia Municipal es infinitamente mejor que la asistencia que se recibe en el Hospital de Laredo.
Así que estamos esperando que se amplíe el hospital o se haga otro para que de esta forma podamos ser atendidos con normalidad. Si no lo hacen puede ser por dos razones: porque no saben o porque no quieren. Para otras cosas ya tienen consignación de sobra, por ejemplo para puertos deportivos. Con relación a la empresa PRO MAIOREM, hay que decir que no tiene responsabilidades en el tipo de contrato que se sacó a concurso por parte del Ayuntamiento, pero desde el primer día que se incorporó a trabajar lo hizo como si la residencia fuese suya. Su principal objetivo fue allanar el camino para la privatización de la gestión y, curiosamente, a esa corriente se sumaron el Alcalde Muguruza, Acuerdo por Castro, el PSOE e Izquierda Unida, y, como hemos escuchado en los medios de comunicación, una parte de las empleadas. Así que a esas empleadas les vamos a explicar cómo funcionan las residencias privadas. En las nuevas residencias terminadas y en construcción, el ratio de empleo que se maneja, y lo pueden comprobar en cada uno de los contratos, es de dos empleos, contando desde el director hasta el último empleado, por cada tres residentes.
Pueden hacer la cuenta, si se obliga a la Residencia a reducir los residentes a 60 como se pretende, porque a algunas de las habitaciones les faltan 10 cm., y cosas por el estilo, para cumplir con la ley, ¿cuántos puestos de trabajo sobran? ¿Se ha iniciado alguna maniobra de estas por parte del Ayuntamiento? Para tapar su nefasta gestión, al Alcalde Muguruza, al Partido Socialista, a Acuerdo por Castro y a Izquierda Unida no se le ocurre otra solución que cambiar unos estatutos de la Residencia que se acaban de modificar en 2005. Para así eliminar a la Junta de Gobierno del control de la gestión y hacer con sus propiedades lo que convenga. Pero esto no es lo más grave, lo que no tiene nombre es que uno de los pocos servicios que funcionan bien en el municipio lo quieran desmantelar. En todas estas semanas lo único que se ha hablado es de la empresa, de los estatutos, de de las prisas del gobierno…., pero ni una palabra de los residentes. Claro, no convenía. Porque ellos prefieren la Residencia Municipal a cualquier otra. ¿Y por qué? Pues muy sencillo porque se les atiende pensando en las necesidades individuales y con mucho cariño. En la Residencia dignidad y humanidad van de la mano y eso es lo que quieren y valoran ellos y sus familias.
Para los políticos eso no tiene valor, lo único que valoran es su capricho y cambiar y acabar con lo que funciona bien, simplemente porque ellos ni lo crearon ni lo manejan a su antojo. Por otro lado el Ayuntamiento se queja de que todos los años tiene que habilitar una partida para la Residencia. Y esto sí que no se puede aguantar ni consentir, puesto que esa partida se utiliza para que las personas muy dependientes, y en ocasiones sin familia directa, y que no alcanzan la concertación, puedan ser atendidas y puedan pasar la última etapa de su vida con dignidad y en Castro. Y entre otras muchas razones para que puedan ser visitadas con más frecuencia. ¿Cuántas subvenciones reparte en total el ayuntamiento cada año? ¿Quiénes son sus beneficiarios y por qué conceptos? ¿Qué tanto por ciento representa la partida de la Residencia en este monto? ¿Qué criterios se utilizan? Desde luego ninguno que tenga que ver con la humanidad, la necesidad y el interés por el estado de dependencia de los mayores.
La exigencia de modernización por parte del Gobierno Regional debe ir acompañada del tiempo suficiente para que pueda llevarse a cabo. Es obligación del ayuntamiento velar por el patrimonio municipal, no dilapidarlo como ha hecho durante los últimos 20 años. Parece que, insatisfechos con su negligencia, quieren esquilmar hasta la última de las propiedades municipales. Y, con ella, la esperanza de una vejez digna y tranquila a quienes más la necesitan. Lo mejor que pueden hacer ustedes, todos ustedes, es esperar a las próximas elecciones municipales. Y que sea la próxima corporación quien afronte un problema que a ustedes les queda demasiado grande. Manifiesten un signo de coherencia y dignidad, aunque no anden muy sobrada de ninguna de ellas, y dejen este asunto tan sensible en manos de personas realmente interesadas en resolver problemas. No en las suyas, que no saben hacer otra cosa que crearlos y agravarlos.
Los ancianos de Castro merecen ser tratados con dignidad y respeto en sus últimos días. Sin que políticos sin conciencia vean en ellos la coartada para perpetuarse en su miseria moral y, al tiempo, que pongan los ojos en el patrimonio que durante tantos años y a través de tantas donaciones ha acumulado la Residencia Municipal de ancianos. ¿En beneficio de quien se realizaron las donaciones, de la empresa PRO MAIOREM, del ayuntamiento, o exclusivamente para los ancianos dependientes? Su último “servicio” a Castro, y concretamente a sus mayores con menos recursos, consiste en tratar de privatizar la Residencia Municipal donde están alojados un centenar de ancianos sin familia ni posibilidad de recibir atención en otro lugar en sus últimos años de vida.
Desgraciadamente los gestores políticos de este Ayuntamiento a los que nos referimos no quieren irse sin haberlo convertirlo en un solar yermo y estéril. Y están obsesionados también con eliminar el último vestigio de algo que funciona correctamente, y esto es así porque está lejos de sus manos. ¿Qué harán después con su patrimonio? ¿Transformarlo en dinero como han hecho con lo que teníamos y como resultado de su gestión no disponer ni de un pequeño solar para ubicar un colegio? Lo suyo es la ineficacia, despilfarro, desorden y generación de problemas en todo lo que tocan y donde antes no los había. Castreños, nos estamos jugando nuestra dignidad como pueblo.
