lunes. 13.01.2025

JESÚS LOBATO DE BLAS / Una barbaridad, una verdadera animalada

Que el Señor misericordioso en su infinita bondad nos libre de posibilidad tan nauseabunda, tan increíble y tan inhumana!. No puede ser verdad, me niego a creerlo absolutamente, pero es lo cierto que el alcalde de Castro Urdiales, al parecer, así lo ha dicho, y el periódico de mayor tirada de Cantabria lo reproduce y proclama entrecomilladamente: "Voy a pelear para lograr la cubrición de la plaza de toros" (18-07-09). Y aunque parezca mentira la realidad, por dura que sea, llega a más: el alcalde de Castro Urdiales, el periódico de mayor tirada de Cantabria insiste minuciosamente en ello, "reconoce que es complicado llevar a cabo su ejecución por cuestiones económicas, pero no se resigna" (18-07-09). Estoy sobrecogido, atónito, desolado y profundamente escandalizado. Nada menos que la cubrición de la plaza de toros. ¡Que barbaridad!.

Con todo, debo reflexionar, pues conociendo las habituales confusiones, excesos y memeces, intencionadas o no, del periódico de mayor tirada de Cantabria deben tenerse muchas y profundas cautelas con sus informaciones o lo que sean. Pero así y todo hasta el mismo periódico de mayor tirada de Cantabria debería conocer perfectamente, tiene por oficio obligación de ello, que una cubrición no es otra cosa, en acepción única y terminante del Diccionario de la Real Academia Española, que la "acción y efecto de cubrir el animal macho a la hembra". Y según esto, ¿que es lo que pretende hacer el alcalde de Castro Urdiales?. Porque cierto es que el señor alcalde es macho, o masculino, nadie lo duda, y la plaza de toros, sustantivo femenino, pero de ahí a calificar al señor alcalde de animal macho, me parece una atrocidad. No entiendo nada.

Además, el periódico de mayor tirada de Cantabria, con esa confusa y rijosa prosa que le caracteriza, insiste en que la complicación del alcalde para lograr la cubrición pretendida obedece, ni más ni menos, que a cuestiones económicas, lo que a mi entender equivale a llamar puta, ramera, meretriz o hetaira a la pobre plaza de toros, pues es bien sabido que tal apelativo merecen quienes, por dinero, acceden a cubriciones y otras actividades similares. El diccionario de doña María Moliner es tajante con el término, y afirma que "se aplica a la mujer muy liberal con los hombres que accede con facilidad a mantener relaciones con ellos" y, para que no haya duda concluye precisando que "se usa como insulto". 

Desconozco lo que le habrá hecho la pobre plaza de toros al señor alcalde de Castro Urdiales, pero su intención es descaradamente clara: pretende su cubrición, lo que, se mire como se mire y se entienda como se entienda no es otra cosa que pretender fornicar, cohabitar, copular, follar o, en román más sencillo y paladino, echarla un quiqui con todas las de la ley.

Insisto, estoy sobrecogido, atónito, desolado y profundamente escandalizado y, naturalmente, no puedo creer lo que el periódico de mayor tirada de Cantabria dice.

¡Un rayo de esperanza!.

Conociendo la torpeza e ineptitud que habitualmente muestra el periódico de mayor tirada de Cantabria, tantas veces desde aquí denunciadas, sólo cabe pensar que lo que en realidad pretende el señor alcalde de Castro Urdiales con su plaza de toros, tan bonita, no sea su cubrición sino su COBERTURA, es decir "lo que sirve para cubrir o tapar algo", que haría lógica la consideración del alcalde de que, de este modo, la plaza de toros, una vez dotada de cobertura, "supondría tener un lugar de acogimiento de múltiples espectáculos" (18-07-09). Eso parece lógico.

Pero el periódico de mayor tirada de Cantabria ni se ha enterado del asunto y machaconamente, dale que te pego, insiste que "la cubrición de la plaza de toros supondría un coste aproximado a los seis millones de euros" (18-07-09).

Yo creo que el alcalde de Castro Urdiales debería hacer alguna aclaración porque, desde luego, el periódico de mayor tirada de Cantabria no se ha enterado de nada, como siempre. ¡Que cruz!.

Extraído de: cantabriaconfidencial.com

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