La Guardia Civil de Cantabria viene detectando últimamente la difusión de diferentes informaciones que se transmiten de forma masiva por WhatsApp y otras aplicaciones, alertando de diferentes situaciones de peligro relacionados con los niños, tales como tentativas de secuestro, entregas de drogas, etc.
Piden que no se reenvíe ningún mensaje de este tipo sin haber sido confirmado previamente por las fuerzas de seguridad de la zona.
Tampoco se deben crear los mismos, que aunque puedan ser bien intencionados, lo primero que hay que hacer es poner en conocimiento de las fuerzas de seguridad la situación de peligro concreta para que se investigue lo sucedido.
Según indican, "el reenvio de estas informaciones sin contrastarlo puede ser una generadora de inseguridad e incluso psicosis en ciertas partes de la sociedad, a buen seguro sin razón. La difusión de estos mensajes por diferentes aplicaciones de mensajería de telefonía móvil están desbancando a las propias redes sociales, llegando incluso hacerse eco de los mismos ciertas webs de internet que facilitan información".
La mayoría de estos mensajes que acaban haciéndose virales son bulos, y casi siempre anónimos, aunque hacen referencia a fuentes fiables, y redactados de forma atemporal para que la cadena no pare, y se puedan seguir repitiendo con el paso de los años.
El gancho de los mismos es siempre el miedo, el factor económico o el morbo, para captar la atención de la persona que los recibe y de esta forma que lo reenvié al mayor número de contactos.
