Los policías, que vigilaban el cumplimiento de los horarios en las zonas de ambiente nocturno, fueron alertados por un ciudadano que les informó de los hechos y facilitó una descripción de los autores.
El dispositivo de búsqueda permitió localizar a dos personas con sendos teléfonos cuyo origen no pudieron justificar.
Así mismo, se les encontraron las llaves de un vehículo que, a pesar de las falsedades manifestadas por los detenidos, pudo ser localizado y registrado, encontrándose en su interior otros tres teléfonos móviles sustraídos. Entonces se procedió también a la detención del titular de este vehículo.
Las víctimas acudieron a denunciar los delitos y pudieron recuperar sus dispositivos.
Posteriormente se pudo comprobar que las personas responsables de estos hechos, procedentes de Santander y Torrelavega, tenían numerosos antecedentes por robos con violencia.