La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado a un año de prisión y a una multa de 1.200 euros a una mujer que encargó un permiso de conducir portugués falso, por el que pagó 800 euros, y que intentó canjear por el español.
Los hechos por los que ha sido condenada ocurrieron en enero de 2009 en Castro Urdiales, donde encargó a cambio de 800 euros, a una persona no identificada, que le facilitara un permiso de conducir portugués que luego presentó en la Jefatura de Tráfico en Santander para canjearlo por uno español, trámite que no consiguió culminar al comunicar las autoridades portuguesas a las españolas que la acusada nunca se había sacado el permiso de conducir en Portugal.
En la sentencia de la Audiencia, se constata además que la mujer "nunca ha estado en Portugal" -en el permiso que presentó en Tráfico consta que reside en Portugal-; que la falsedad del permiso portugués, usado en España y ante autoridades españolas, "ni siquiera se cuestiona"; y se considera acreditado que la recurrente "no fue engañada ni estafada".