Un obrero de la construcción mató ayer de ocho puñaladas a un compañero
de trabajo en las obras de la Prolongación de la Avenida Virgen del
Puerto de Santoña.
El
agresor, un vecino de Baracaldo de 21 años de edad que trabajaba para
una subcontrata desde hace unos días, se entregó pocas horas después en
las dependencias de la Ertzaintza en la localidad vizcaína de Sestao.
Los
hechos se produjeron sobre las 8.45 horas de la mañana en la zona de
los garajes subterráneos de una urbanización en construcción en la
parte trasera de la Avenida Virgen del Puerto, muy próximas a la Casa
Consistorial de Santoña.
Según fuentes de la Guardia Civil, el
agresor, J.H.S, vecino de Baracaldo, arremetió con un puñal contra
E.Q.M, un operario de grúa de 34 años de edad y residente en la
localidad cántabra de Pámanes.
La víctima, que
perdió mucha sangre, fue atendida sin éxito por una facultativo del
Centro de Salud de Salud de Santoña y la ayuda de un miembro de la
Policía local, falleciendo a los pocos minutos del ataque.
Según fuentes de la Delegación del Gobierno, el agresor había mantenido
una discusión con la víctima la tarde antes del suceso motivada por el
manejo de una manguera en una de las zonas de la obra.
Al
parecer, el presunto homicida no estaba de acuerdo con la decisión de
la empresa que derivó en una trifulca con su compañero.
Todo
quedó así, hasta que en la mañana de ayer, cuando el agresor se dirigió
a su trabajo se encontró con E.Q.M en los garajes subterráneos de la
obra y le asestó ocho puñaladas con un arma blanca, un puñal de gran
tamaño.
A continuación, el atacante, para abrirse paso, subió a
su automóvil y, mientras atravesaba el polígono industrial de Santoña
se estrelló contra otro vehículo que pertenecía a un vecino de Castro
Urdiales.
Al ver que su coche quedó averiado amenazó con su puñal al conductor y le robó el vehículo.
Acto seguido prosiguió la huida por la autovía del Cantábrico en dirección, posiblemente, a su domicilio de Baracaldo.
De la persecución se hicieron cargo los miembros de la Policía Municipal y de la Guardia Civil de Santoña.
A media mañana, J.H.S se entregó a la Ertzaintza en Sestao y puso su arma a disposición de los agentes.
El trágico suceso ha causado una gran conmoción entre la veintena de trabajadores de la obra donde se sucedieron los hechos.
La víctima era muy apreciada por sus compañeros y trabajaba como operario desde principios del pasado verano.
De
hecho, ayer decidieron cerrar la obra por unos días en señal de duelo
por la muerte de E.Q.M, una decisión arropada y apoyada por los
directivos de la empresa Ascan.
El presunto homicida llevaba pocos días trabajando en la obra de
Santoña, sin embargo, ya había levantado cierto recelo entre los
propios empleados por sus continuas provocaciones.
Se
da la circunstancia de que había sido despedido de su trabajo pocas
horas antes de los hechos, y, esta situación podría haber provocado
este lamentable final.
A la Prolongación de la Virgen del Puerto donde se produjeron los
hechos acudieron las brigadas de la Guardia Civil y de la Policía
Municipal, junto a la Policía Judicial y la juez de instrucción número
2 de Santoña, que procedió al levantamiento del cadáver pasadas las
doce del mediodía.
La zona permaneció acordonada durante varias horas.
El supuesto homicida será puesto a disposición del juez de guardia de Baracaldo para proceder al correspondiente interrogatorio.
Extraído de: eldiarioalerta.com