Así ha reaccionado el PSOE tras conocer que el PP de Castro Urdiales abandona las conversaciones con socialistas y regionalistas para impulsar un cambio de Gobierno y que ha exigido la disolución del Ayuntamiento y la constitución de una gestora que lo administre hasta las elecciones.
En declaraciones a EFE, el secretario general del PSOE de Castro Urdiales, Daniel Rivas, ha considerado que la salida del PP de las conversaciones ha estado "teledirigida" desde Santander, concretamente, por su presidente, Ignacio Diego.
Rivas, que ha conocido la noticia a través de los medios de comunicación y aún no tiene "comunicación oficial" por parte del PP, ha asegurado que el presidente de los populares castreños, Iván González -encargado de hacer pública la decisión-, "lo único" que ha hecho es "leer un comunicado que le han dictado" desde Santander.
Aunque Rivas ha reconocido que le ha "sorprendido" la decisión del PP, ha asegurado que su partido seguirá buscando "fórmulas de gobernabilidad" para el Consistorio y ha señalado que, una vez que el PSOE analice la situación, estarán dispuestos a "sentarse a hablar" con otros partidos, si bien con algunas "premisas".
A juicio de Rivas, el PP ha demostrado con esta decisión su "irresponsabilidad" y su objetivo de defender sólo sus "intereses partidistas" y "eludir responsabilidades".
Además, ha calificado de "excusa" el argumento empleado hoy por el PP para justificar su decisión, que ha vinculado a la posibilidad de que el propio Rivas se viera afectado próximamente en algunos expedientes y procedimientos judiciales por ser la "mano derecha" del ahora líder de Acuerdo por Castro (AxC) durante su etapa como alcalde.
Ante este pronóstico de los populares, el secretario general del PSOE local se ha preguntado si el PP dispone de alguna "información privilegiada" que justifique sus palabras y ha opinado que éste pretende "distraer" y así no "dar gobernabilidad" al Ayuntamiento.
"Si no es esa excusa, mañana será otra", ha dicho Rivas, quien ha recordado que, tras reunirse con el PP el pasado miércoles, los populares ya condicionaron su continuidad en las negociaciones a que el PSOE retirara a su concejal imputado, Víctor Echeverría.
Ha explicado que como el PSOE le aseguró ese día que esta exigencia no supondría un obstáculo para la negociación, el PP ha presentado hoy otra "excusa".
Además, ha aclarado que durante el período que Díaz Helguera -ex del PSOE- fue alcalde, él no era concejal y sólo formaba parte de su "personal de confianza".
Rivas se ha mostrado en desacuerdo con la postura del PP de solicitar la disolución del Ayuntamiento, ya que considera que la "solución" para Castro Urdiales "no pasa" por adoptar esta medida, sólo puesta en marcha hasta ahora en el consistorio de Marbella (Málaga).
Ha preguntado al PP si considera que el Ayuntamiento de Castro Urdiales -que han gobernado desde 2003 hasta "hace cuatro días" con Muguruza- le pasa "lo mismo" que al Consistorio marbellí y ha asegurado que, en tal caso, los populares serían "responsables" de la situación originada.
Rivas ha explicado que pensaba que el PP local se había "regenerado" con el cambio de su presidente -Iván González sustituyó el pasado enero a Agustín Fernández en este puesto- pero, según ha dicho, la decisión que ha tomado hoy este partido le demuestra que sigue siendo "lo mismo".
A su juicio, el PP no quiere promover un cambio de gobierno porque, tras la detención y encarcelamiento provisional de Muguruza, ahora ha asumido el cargo de alcalde en funciones José Miguel Rodríguez, un concejal que, según Rivas, continúa diciendo que "sigue siendo del PP" a pesar de que fue suspendido de militancia.
Rodríguez, quien asumió las funciones de alcalde tras la detención de Muguruza, pidió en noviembre su baja temporal del partido, después de que la Fiscalía le acusara de un delito de prevaricación por el caso Mioño.
Semanas más tarde, recibió una segunda acusación por prevaricación y tráfico de influencias en la contratación de la empresas de desratización Trapur.